Miguel de Unamuno fue uno de los mayores críticos a la monarquía y a la dictadura de Primo de Rivera, también fue concejal en Salamanca durante el gobierno republicano. Pero, durante el golpe de estado, hará un acercamiento a la Falanje ¿Porqué?
Algunos especialistas explican el porqué de que Unamuno pasara del rechazo inicial, a la adhesión y nuevamente al rechazo al bando franquista:
Repasando los seis meses entre el 19 de julio de 1936, (cuando se declaró el estado de guerra en Salamanca) hasta el 31 de diciembre de aquel año, (el día de la muerte de Unamuno):
El escritor nunca estuvo en contra de la República; distinguía entre la República española –que defendía– y la España republicana –que desaprobaba–. Su descontento con los gobiernos de la República comenzó a raíz de la obligatoriedad de la lengua catalana que establecía el Estatuto Catalán, lo que le llevó a enfrentarse a Azaña.
Su segunda disensión vino por el tratamiento de la cuestión religiosa, por el asedio a la religión católica, a la que no pertenecía.
Creía en una república liberal y era contrario a la lucha de clases. No quería una religión de Estado, pero tampoco que el Estado se convirtiese en religión. Deseaba una república civil –no militar–, laica –que no irreligiosa– y social, sin plutocracia.
La detención de un amigo suyo, (el ministro Filiberto Villalobos) y fusilamientos como los de Salvador Vila (su alumno predilecto), asesinado en el mismo pueblo granadino donde mataron a Lorca, fueron decantando a Unamuno hacia el rechazo total a los sublevados. Reflejando, su equivocación al apoyar a los franquistas, en estas palabras los días antes de su muerte: "¡Qué cándido y qué ligero anduve al adherirme al movimiento de Franco!"
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MIRIAM ADÁN GALÁN 2ºB
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